31 de marzo de 2012

Hoy

Hoy me di cuenta de muchas cosas:

A veces uno confunde amar o querer con someterse y no está bien. Personalmente creo que es eso lo que hace daño y no el amor de verdad. El amor de verdad no daña, ni nos obliga a resignar nada, sino que sin quererlo, uno va depurando su propia cotidiananeidad, limpiándola de cosas prescindibles e innecesarias en favor de aquello que le hace bien ¿Cómo va a hacer mal algo tan puramente hermoso?

El amor de verdad es encontrar algo que no se encuentra en ningún otro rincón; es dar sin esperar nada a cambio y terminar recibiendo la belleza de dar lo que dimos en principio; es aprender a fabricar lágrimas de amor que no duelen ni angustian ni nada, sólo es amor que sale por los ojos.

El amor de verdad es admitir que no se puede escribir qué es el amor de verdad porque es tantas cosas a la vez que el tiempo que lleva la humanidad existiendo en este mundo no alcanzaría para fabricar esa cantidad de papel y lápiz.